Cuando nos planteamos construir nuestro hogar, la conversación suele girar en torno al «precio por metro cuadrado». Es la métrica estándar de la construcción tradicional. Sin embargo, en Behome creemos que esa cifra es incompleta. Mirar solo el coste de construcción sin mirar el «coste de vida» de la vivienda es un error financiero común.
Una casa no debería ser un pozo sin fondo de gastos de mantenimiento y facturas energéticas. Al contrario, debe ser una inversión segura: un activo que mantiene y aumenta su valor generación tras generación.
Hoy analizamos la rentabilidad real de construir bajo estándares PassivHaus Premium y bioconstrucción. ¿Salen las cuentas? La respuesta corta es sí. La respuesta larga te la explicamos a continuación.
1. La matemática del ahorro: reducción drástica de facturas
El primer retorno de inversión es inmediato y mensual: la factura energética.
En una vivienda convencional, gran parte de tu dinero se escapa literalmente por las ventanas, los puentes térmicos y los muros mal aislados. Estás pagando por calentar o enfriar la calle.
La propuesta de valor de Behome se basa en una reducción drástica del consumo energético. Gracias a la arquitectura bioclimática y al estándar PassivHaus Premium, conseguimos:
- Temperatura estable todo el año sin depender de la calefacción central constante.
- Ausencia de zonas frías o calientes gracias a un diseño libre de puentes térmicos.
- Ventilación de doble flujo con recuperación de calor, que climatiza el aire nuevo con la energía del aire saliente.
Esto transforma las facturas energéticas mensuales de un «susto» a un coste mínimo, casi residual. Multiplica ese ahorro mensual por 30 o 40 años de vida útil: el resultado paga una gran parte de la vivienda.
2. Revalorización patrimonial: Un activo preparado para el futuro
El mercado inmobiliario está cambiando. Las normativas europeas son cada vez más estrictas con la eficiencia energética y la huella de carbono.
Una casa construida hoy con los estándares mínimos legales (Código Técnico) será una casa «vieja» y energéticamente obsoleta dentro de 10 años. Su valor de mercado bajará porque requerirá reformas costosas para adaptarse a las nuevas exigencias.
En cambio, una casa Behome se diseña para garantizar una revalorización del patrimonio a largo plazo7. Al cumplir hoy con estándares de excelencia técnica y sostenibilidad que serán obligatorios en el futuro, estás protegiendo tu dinero.
- Certificaciones: Trabajamos con sistemas de evaluación reconocidos que certifican la salud y eficiencia del hogar. Este «sello de calidad» documenta el valor del activo ante una futura venta.
- Demanda creciente: Cada vez más compradores buscan el «Lujo consciente»: espacios que cuiden su salud y el planeta. Tu casa será un producto escaso y deseado.
3. Durabilidad y Mantenimiento: El mito de la fragilidad
Existe la falsa creencia de que los materiales naturales como la madera son menos duraderos que el hormigón. Nada más lejos de la realidad si se utilizan con la tecnología adecuada.
Nuestra misión es la permanencia; diseñamos viviendas para durar.
- Utilizamos materiales vivos (paneles de madera y paja) que, al estar protegidos por una cubierta multicapa impermeable y estanca, no sufren el desgaste de la intemperie.
- Al evitar las condensaciones y humedades (gracias a la transpirabilidad de los materiales), la estructura se mantiene sana durante décadas, reduciendo los gastos de mantenimiento que suelen aparecer en obras convencionales por grietas o humedades.
4. Financiación Verde: Los bancos también lo prefieren
La banca ya reconoce el valor de la sostenibilidad. Las «Hipotecas Verdes» ofrecen mejores tipos de interés y condiciones a las viviendas con alta certificación energética (Clase A o PassivHaus).
Al presentar un proyecto 360º con presupuesto cerrado y certificaciones verdes, el perfil de riesgo para la entidad bancaria baja, facilitando el acceso a una financiación más barata. Es decir: te cuesta menos dinero pedir prestado el dinero para construir una casa ecológica.
Conclusión: Gasto vs. Inversión
La construcción tradicional se centra en abaratar el coste inicial, ocultando los altos costes futuros (facturas, reformas, salud). The Behome Way propone lo contrario: una inversión inicial consciente para una vida de libertad financiera y bienestar.
No estás comprando solo un techo; estás adquiriendo salud preventiva y un refugio de valor creciente15151515.
¿Quieres ver cómo se materializa esta inversión?
Actualmente estamos finalizando la Casa Francaset en Roda de Berà, Barcelona. Es una oportunidad perfecta para visitar la obra, sentir la temperatura, el silencio y entender por qué una casa Behome es el activo más seguro para tu familia.


